Uso Del DESA
05.08.2015
Se requiere estar capacitado, pero cualquiera puede utilizarlo si es necesario
El DESA (Desfibrilador Externo SemiAutomatico) es un aparato electrónico portátil que diagnostica y trata la parada cardiorrespiratoria mediante impulsos de corriente al corazón. En primer lugar hemos de decir que este aparato es totalmente seguro ya que solo emite corriente si diagnostica que el corazón no tiene función mecánica; es decir, si detecta latidos no emite la corriente. Además algo muy interesante y que no muchos saben, es que la aplicación de impulsos de corriente es la única forma de sacar al paciente de la parada cardiorespiratoria de modo que si tenemos la oportunidad de utilizarlo no debemos esperar.
El Decreto 151/2012, de 20 de noviembre, por el que se establecen los requisitos para la instalación y uso de desfibriladores externos fuera del ámbito sanitario, establece los requisitos de la formación que deben tener las personas que deben aplicar, preferentemente, la desfibrilación, y que se conocen como primeros intervinientes, pero abre también la posibilidad del acceso público a la desfibrilación, en el caso de aparatos ubicados en la vía pública, y, en cualquier caso y con independencia de la ubicación del aparato, en supuestos de necesidad cuando no haya disponible un primer interviniente en el momento necesario.
Si nos encontramos ante una situación de parada cardiorespiratoria hemos de aplicar los tres principios básicos de primeros auxilios (PAS): Proteger, Avisar y Socorrer. Es en este tercer punto donde más dudas nos asaltan, ya que pensamos si lo que hacemos puede ser de ayuda o pueda empeorar la situación, pero lo que realmente nos impide socorrer no es lo que pueda suceder; ya que evidentemente estamos actuando de manera desinteresada, sino las consecuencias. Vivimos en una sociedad en la que buscamos responsables para todo y si al actuar nos equivocamos podemos vernos envueltos en un buen lío.
El hecho de ser un “aparato que da descargas eléctricas” nos merece todo el respeto del mundo, y si además has de tener formación... De esta forma algunos serían capaces de dejar morir a una persona por “miedo” de no saber utilizar el DESA o por “miedo” a las consecuencias.
La utilidad y necesidad de estos aparatos es incuestionable y deberíamos de ver estos aparatos en cualquier inmueble publico y privado (hoteles, restaurantes, centros comerciales, piscinas, colegios, etc..). Lamentablemente no es así, unas veces por falta de formación e información y otras por falta de diligencia de las autoridades, que como suele pasar en este país esperan que suceda una desgracia para tomar cartas en el asunto.